25 Oct Castañas en dulce.
La castaña es un producto típico del otoño que se suele asociar a la Navidad aunque en España también se toma en Carnaval y en Semana Santa.
La castaña y la bellota han sido un alimento básico del Mediterráneo no solo de los pastores que las recolectaban a su paso por el bosque sino de aquellas regiones pobres en cereales en las que su harina sustituyó a la de trigo. Aun en la Sierra de Cádiz hay numerosas recetas de tartas de bellotas.
Las castañas se suelen tomar asadas, cocidas y en dulce ya sea como potaje con arroz o alubias o en compota con anís. Otro uso importante de las castañas es la harina, con ella se puede preparar pan (pan de castañas), pasteles y pasta.
En España hay numerosas fiestas relacionadas con la recogida de las castañas que se realiza a finales de octubre o principios de noviembre es el magosto en Extremadura, Galicia y en El Bierzo, amagüestu en Asturias, “La Castanyada” en Cataluña y magosta en Cantabria. En el País Vasco y Navarra dicha fiesta tradicional se denomina gaztañerre eguna (en euskera, “día de la castaña asada”) o gaztain jana (“comilona de castañas”). En Canarias también se celebra y se denomina “Castañada”.
Los elementos comunes de esta fiesta son la celebración en el mes de noviembre (o finales de octubre) y el tener como elementos principales la castaña y el fuego.
INGREDIENTES
- 1 Kl. de castañas pilongas
- 200g azúcar
- Corteza limón
- 1 palo canela
- 10 clavos olor
- 6 semillas de anís estrellado.
- Una cucharada de Matalahúga,
- Sal
- 5 cucharadas de aceite oliva virgen
- Una rebanadita pan
PASOS A SEGUIR
- Aunque las caastañas pilongas ya viene pelada hay que repasarlas muy bien quitándoles toda la piel para que no amarguen.
- Poner en remojo las castañas la noche anterior.
- No tirar el agua pues sirve para la cocción una vez colada.
- Al día siguiente poner las castañas en una cacerola cubiertas con el agua del remojo.
- Añadir la sal, la cáscara de limón, los clavos, la canela y el anís estrellado.
- Freír el pan en el aceite y reservar.
- En el mismo aceite, fuera del fuego para que no se queme freír la matalahúga.
- Echar el aceite colado sobre las castañas reservando los granos de matalahúga.
- Triturar el pan con la matalahúga y un poco de agua de la cocción y añadirlo también a las castañas.
- Cubrir las castañas el con agua que queda del remojo y completar, si hace falta, con mas agua ya que deben quedar cubiertas.
- Cerrar la olla y dejar cocer unos 45 minutos desde que empiece pitar. Pasado este tiempo, las pinchamos con un tenedor para ver si están tiernas.
- Abrir la olla sacar la cáscara de limón , añadir la copa de anís y el azúcar y dejar hervir otros 30 minutos.
- Probar de azúcar y si es necesario añadir un poco más, según el gusto de cada uno.
- La castaña debe quedar tierna pero no deshecha y el caldo con sabor azucarado.
- El caldo tiende a espesar por lo que puede ser necesario añadir más agua.
- Mejor hacerlas en día antes para que cojan más sabor
- Se conservan muy bien durante varias semanas cubiertas por el almíbar.
TRUCOS Y CONSEJOS
- La castaña pilonga o castaña deshidratada es un producto natural con una conservación muy larga. Es simplemente la castaña natural secada al humo, que mediante el proceso de deshidratación llega a perder hasta un 20 % de su humedad. Al contrario que la castaña cruda, mas indigesta, la castaña pilonga es fácil de digerir aportando hidratos de carbono, fibra y poca cantidad de grasa, a diferencia del resto de los frutos secos.
- Para poder consumirlas hay que volver a hidratarlas poniéndolas en remojo durante uno o dos días.
- La castaña es ideal para la comunidad celíaca ya que no contiene gluten y una vez secas se puede moler y convertirse en harina e incluirse en la dieta diaria en recetas tanto dulces como saladas.
No hay comentarios