Un año más  pasaron las fiestas. Finalizaron las vacaciones, los niños vuelven al colegio, los mayores al trabajo y de nuevo se impone la rutina diaria.  Ya es hora de que también le demos un respiro a nuestro organismo terminado el “tiempo muerto” de las Navidades.

No nos hemos privado de nada y hacemos bien. No era el momento de prohibiciones. Pero hay que ser serios y, más por salud que por estética (aunque también), debemos empezar a comer de una manera mas sana y ayudar a nuestro cuerpo a recuperar el equilibrio. Esto se logar con unos cuantos consejos muy simples.

UNOS CUANTOS CONSEJOS

Huir de las “dietas milagros”. Tan nocivo es comer  excesivamente como comer poco o tomar solo líquidos. Se pierden kilos pero nuestro organismo sufre y se produce el temido efecto rebote. Los kilos perdidos se recuperarán con creces.

Comer sano y de manera equilibrada, sin que falte ningún alimento. Cuanto mas variada sea nuestra dieta  mejor ya que de esta manera  estaremos seguros de que aportamos todos los nutrientes que nos hacen falta. Así que frutas y verduras, claro, pero también legumbres, carnes y pescados y de vez en cuando algún capricho dulce.

¡Ah! y muy importante cocinar con imaginación.  Vamos a despedirnos de la aburrida pechuga de pollo a la plancha con ensalada. Se pueden elaborar recetas muy apetitosas y muy sanas.  Si nos esforzamos un poco llegaremos a las comidas con la ilusión de probar algo nuevo.

Hacer un poco de ejercicio, cada uno según sus posibilidades. Se trata de disfrutar con un paseo en bici, caminar por una playa o hacer alguna actividad en el gimnasio que nos guste. Si lo tomamos como una imposición seguro que buscaremos excusas para dejar de hacerlo. Es bueno quedar con amig@s  así cuando nos entre la desgana o nos llame el sofá esas tardes fresquitas el grupo nos servirá de estímulo. Y no olvidar nunca que “no engorda la comida sino un estilo de vida”.

Y ya está. Básicamente es solo eso. Podemos añadir otros consejos como hacer cinco comidas al día, no pasar hambre que solo nos creará ansiedad,  seguir  los sabios consejos de la sabiduría popular “desayuna como un rey, almuerza como un burgués y cena como un pobre”, beber líquidos no azucarados sobre todo zumos naturales, infusiones y agua…

¡COME ENSALADAS!

Para ayudaros hemos elaborado un monográfico de ensaladas. No somos nutricionistas ni dietistas. No se trata de una dieta alimenticia, algunas de las ensaladas no son lo que se dice “propiamente de régimen” pero todas son muy muy sanas y algunas se pueden tomar como plato único.

Cada vez nos gustan más las ensaladas. Son una de las elaboraciones  más versátiles ya que admiten casi infinitas combinaciones de sabores, texturas y temperaturas. Verduras de hojas verdes, setas, frutas, tomates, patata, cebollas y cebolletas, especias, frutos secos, semillas, mariscos, carnes y pescado. …Todo puede ser el ingrediente de una buena ensalada. Y no hablemos de las salsas: vinagreta tradicionales o de sabores añadiendo distintos tipos de vinagre, cítricos o frutos secos; pestos con rúcula o albahaca, mayonesas de aguacate, de mostaza, con miel…..Solo hace falta un poco de imaginación y con una ensalada podremos comer diferente cada día.

¡Mira nuestro monográfico y seguro que  te costará decidirte!