23 Nov Solomillo al Pedro Jiménez
Os dejamos hoy una receta de toda la vida, una ajada elaborada con aceite de oliva y ajos que sirve de salsa a unos medallones de solomillo de cerdo. Para darle un toque dulce le hemos añadido un vasito de vino dulce Pedro Jiménez, pero si no os gustan esta combinación de sabores podemos sustituirlo por oloroso, fino o brandy. Están igual de bueno.
INGREDIENTES
- Dos solomillos de cerdo
- Seis dientes de ajo
- Aceite de oliva virgen extra
- Un vasito de Pedro Jiménez
- Pimienta y sal
PASOS A SEGUIR
- Cortar el solomillo en medallones de un dedo de grosor y salpimentarlos
- Pelar los ajos y cortarlos en láminas gorditas para que se cuezan en la salsa y casi se deshagan
- Freírlos – no demasiado- en una sartén en la que hemos echado aceite de oliva virgen extra. No quedaros cortos con el aceite porque lo mejor de la receta es la salsa.
- Echar sobre los ajos los medallones de solomillo y sellarlos (pasar por uno y otro lado hasta que adquieran un color mas blanquecino). Dejar que se cuezan en la salsa unos dos minutos y añadir el vino
- Cocer dos minutos más y apartar. La carne debe quedar jugosa y no muy hecha.
- Servir con una guarnición de verduras cocidas y rehogadas en una sartén con un poco de aceite. Le va también muy bien el puré de patatas o el arroz en blanco.
TRUCOS Y CONSEJOS
Tradicionalmente en España se cultivan dos variedades de ajo: el blanco en Castilla y León y Andalucía y el morado, original de Castilla La Mancha que están siendo suplantadas por variedades similares procedentes de semillas chinas con un alto rendimiento por lo que su precio es muy inferior al español.
Aconsejamos comprar siempre ajos morados que se diferencian mejor de los que nos llegan de fuera (China, India o Corea) ya que por fuera a diferencia de estos ajos extranjeros) la piel es blanca y solo al sacar los dientes vemos que están recubiertos por una piel violeta.
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