Los Sherry Explorers celebramos la International Sherry Week con historia y vinos de Jerez. Una nueva actividad organizada por nuestra amiga Virginia Miller , una  apasionada de los vinos jerezanos que trabaja incansablemente para divulgar su conocimiento y fomentar su consumo.

PRIMERO VISITAMOS EL  MUSEO ARQUEOLÓGICO

El museo se sitúa en uno de los barrios más antiguos de Jerez, el barrio de San Mateo, concretamente en la Plaza del Mercado. El núcleo principal de la exposición permanente se encuentra en un palacete de finales del siglo XVIII, una casa patio con la estructura típica de los palacios barrocos.

Creado en 1963 a partir de la Colección Arqueológica Municipal,  en 1982 se le unieron los materiales procedentes de las excavaciones del Servicio Municipal de Arqueología.

El museo cuenta con  11 salas dedicadas a la paleografía de Jerez y una selección arqueológica que explica la evolución de los asentamientos humanos en la comarca desde el Paleolítico hasta la Edad Media mas una sección dedicada a numismática desde la Antigüedad hasta el siglo XIX.

María José Daza, miembro de la Asociación Amigos del Museo fue nuestra guía. El museo tiene una importante colección de piezas procedentes de yacimientos locales, destacando Mesa de Hasta y el propio Jerez y algunas de sus piezas son excepcionales y de gran valor histórico como el casco griego arcaico y el plato de cerámica califal.

URIUM V.O.R.S

Pasamos después a la Bodega Urium en la que las explicaciones de Alfonso y Rocío, padre e hija, nos ayudaron a entender unos  vinos que el tiempo y el saber del bodeguero han convertido en espectaculares.

La bodega, una de las más pequeñas del marco, esta en el centro histórico de Jerez. Pequeña pero  coqueta con suelos de albero, ventanas cubiertas con grandes esterones para dar sombra a los vinos y un pequeño patio donde no falta una parra y un pozo.

Al entrar el olor del vino te golpea la nariz y te sumerge de lleno en ese mundo misterioso de pequeños seres – mohos y  levaduras-  que tienen por oficio una de los trabajos más digno y antiguos: fabricar el vino.

La bodega es también un sueño hecho realidad, una ilusión de toda una vida que por fin Alfonso Ruiz ha podido hacer realidad al adquirir una pequeña bodega anteriormente propiedad del gerente de Valdespino.

Y faltaba ponerle nombre a los vinos y a la bodega: Urium, el antiguo nombre romano de Moguer, localidad de la que es oriunda la familia y un homenaje a Platero por el que Alfonso siente una especial devoción.

Es una  bodega de crianza,  no tiene viña. El mosto lo obtiene de una viña que cultiva la uva con los parámetros que le dictan los propietarios.

Alfonso y Rocío lo tiene claro: no iban a producir vinos baratos  En un primer momento salieron al mercado con el fino en rama, la manzanilla y la gama V.O.R.S. (vinos generosos de más de 30 años pero que en el caso de las soleras de Urium se ha demostrado vía carbono 14 que su edad supera los 40) posteriormente deciden crear otra gama de vinos, más jóvenes (entre 12 y 15 años aproximadamente) y más económicos: Los Clásicos

Dos principios rigen la filosofía de la bodega: que el vino esté marcado, es decir que conserve su propia esencia y que sea elegante y equilibrado manteniendo los rasgos que le dan su personalidad.

En fin, una fiesta en la que la bodega aportó sus excelentes vinos- Fino en Rama, Amontillado, Palo Cortado, Oloroso, Pedro Ximénez – los Sherry explorers las tapas y todos juntos celebramos entre cantes esta semana dedicada a la excelencia de nuestros vinos de Jerez

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