Con motivo del centenario de su muerte,  la Fundación Federico Joly Hohr ha organizado una muestra sobre la figura de Mariano Pardo de Figueroa, alias doctor Thebussem, un personaje singular,  con múltiples facetas, entre ellas la de gastrónomo.

En la muestra que se encuentra expuesta en el Centro Reina Sofía hasta el 31 de diciembre, se exponen parte de los fondos que la Fundación Joly dispone sobre esta interesante figura gaditana ya que la falta de espacio y catalogación no ha permitido exponerlos íntegramente.

Charo Barrios del blog Come en Casa tuvo el acierto de contactar con Ángel Guisado – archivero-bibliotecario de la Fundación Federico Joly Höhr y comisario de esta exposición para organizar una visita privada a la que asistimos un grupo de blogueros gastronómicos gaditanos. En ella no solo nos fueron explicados con detalle los fondos expuestos al publico  sino que pudimos acceder a parte de los están guardados pendientes de restauración y catalogación.

Los fondos se han reunido gracias al esfuerzo de Federico Joly, un personaje que curiosamente comparte con Mariano Pardo Figueroa algunos rasgos de carácter y formación académica. Ambos son licenciados en derecho , muy cultos, con inclinación a la escritura y ambos también tienen un afán coleccionista que en el caso de Federico le  lleva a  ir adquiriendo en anticuarios parte del legado de Mariano que los herederos habían ido vendiendo.

Con estos fondos se crea la Fundación que cuenta con manuscritos, libros de su biblioteca privada, cartas- más de 1.200 – libros impresos por el mismo, artículos sobre tauromaquia, poesía y teatro, historia, filatelia, gastronomía, Cervantes…. Y una curiosa colección de recortes, anotaciones, dibujos, datos sobre la administración de su casa ….. dignos de un estudio profundo para conocer mejor a este curioso personaje , la historia y la vida cotidiana  del siglo en el que le tocó vivir.

Porque a Mariano Pardo Figueroa le interesaba todo y guarda todo lo impreso. Su desahogada economía le permitió disponer de mucho tiempo libre para viajar y conocer a figuras señeras de la historia del siglo XIX español y europeo con las que mantiene una interesante correspondencia que forman parte de estos fondos.

Su preocupación por la filatelia y las cartas postales que empezaban a enviarse en aquellos tiempos en Inglaterra,  le hizo ser merecedor del titulo de “Cartero Honorario del Reino y de las Indias” (1880) cargo sin retribución económica pero que le aportaba algunos privilegios como utilizar el uniforme del cuerpo y disponer de  matasellos propio en su correspondencia para franqueo gratuito.

Fue también Caballero de la Orden de Santiago conservando la Fundación el expediente de “limpieza de sangre”.

Con las explicaciones de Ángel guisado nos fuimos haciendo una idea de la personalidad de esta destacada figura gaditana. Un personaje muy interesante, cultísimo, polifacético y variopinto, quijotesco,  con gran sentido del humor y un tanto al margen de lo que se consideraba convencional en su época;   un escritor caracterizado por un estilo fino y erudito, con una sátira elegante, cortés y alegre que le valió ser nombrado miembro de número de las Academias de la Lengua y de la Historia.

Esta atractiva personalidad queda reflejada en algunas de las anécdotas que nos fue contando Ángel Guisado. Por ejemplo creo la curiosa Hermandad de los Sisones, que establecía en sus estatutos  la obligación de robar un plato de todos los eventos, cenas, almuerzos o lunch a los que era invitado.

Otra que nos pareció especialmente divertida fue el síncope que simuló en el Salón de Plenos del Ayuntamiento de Medina (1847) para librarse del nombramiento de alcalde de su ciudad ya que Mariano no tuvo nuca aspiraciones políticas.

También dice mucho sobre su personalidad el alias que eligió para sus escritos gastronómicos Dr Theussen , anagrama de “embuste”  que germaniza con “th” para dar mas intriga al personaje y acentuar la objetividad con la que se acerca a la gastronomía española.

 En fin que nos encantó la visita, que Ángel Guisado resultó ser un perfecto anfitrión y Mariano Pardo Figueroa  ha dejado de ser para nosotros ese desconocido que tiene una calle en Medina.