22 Ene Bar La Punta del Sur.
Hemos descubierto un sitio nuevo: La Punta del Sur. En el Barrio de la Viña, cerca de la Caleta y en una calle castiza – San Félix- que se abre al mar dejando ver al fondo el arco del arrecife.
Un bar sin más pretensiones que ofrecer lo mejor que saben hacer, con una carta corta pero muy cuidada, de base tradicional mediterránea con algunos guiños novedosos.
Es de reciente apertura, pero en apenas unos meses -desde el verano pasado- ya está el primero en los bares recomendados por trip ad visor. Como suele ocurrir el mejor indicador de la calidad de un local son sus clientes y el domingo estaba lleno, ni una sola mesa libre y solo algunos huecos en la barra.
EL ENCANTO DE LO SENCILLO
El local no es ni grande ni pequeño, con bancos en la barra y algunas mesas. Un amplio salón con vigas antiguas a la vista. Todo en blanco y azul, todo reciclado y con bajo presupuesto, con el encanto de lo sencillo. Fuera unos cajillos tuneados sirven de apoyo para tomar lo que quieras mirando al mar. La decoración acorde con su nombre: redes, nasas con bombillas como lámparas, poteras y una tabla de surf.
LO RECOMENDAMOS
Se nos atojó el arroz negro con puntillitas y alioli de azafrán y después acertamos al dejarnos aconsejar por Mario Tristán Sánchez Santos: cazón en adobo y gigantescas tortillas de camarones servidas en cucuruchos de papel de estraza, ensaladilla con mayonesa de trufa, patatas aliñás con vinagreta de perejil y tagliatelle a la carbonara como los auténticos, sin nata y salsa de huevo. No llegamos a los postres pero en la carta tenían una pinta estupenda.
ESTUPENDA RELACIÓN CALIDAD-PRECIO
Y para terminar un dato importante: la relación entre el precio, la calidad y la cantidad ya que la tapas son abundantes casi medias raciones y con dos de ellas puedes perfectamente comer Todo lo anterior, mas doble turno de bebidas para tres 27€.
UNA FOTO PARA EL RECUERDO
Como recuerdo una foto con la catedral y el mar de fondo mientras caminábamos por el Campo del Sur para tomar un café con dulces en Casa Hidalgo.
No hay comentarios